domingo, 18 de enero de 2009

Casi 3 mil jubilados bancarios siguen sin cobertura médica en Rosario


Unos 2.800 jubilados bancarios de Rosario están sin cobertura médica debido a que la obra social que los nuclea cortó casi todas las prestaciones a nivel nacional. En la sede local de la Asociación Bancaria admiten que el reclamo es justo e indican que "ya se hicieron todas las gestiones ante los responsables en Buenos Aires".

El corte casi total del servicio lleva acumulados más de seis meses y afecta en esta ciudad a 2.800 jubilados, quienes no pueden realizarse estudios de diagnóstico y análisis clínicos porque carecen de cobertura.

Sólo urgencias. Los afiliados a la Obra Social de los Bancarios (Osba) acuden al Sanatorio Julio Corzo pero, según señaló una de las damnificadas, María Angélica Savagnoni, en el efector "sólo atienden las urgencias, no existe la medicina preventiva y tampoco el tratamiento para problemas oncológicos".

El titular de la Asociación Bancaria en Rosario, Matías Layús, admitió la existencia del reclamo, al que reconoció como "justo". En este sentido, apuntó que a nivel nacional se armó un fideicomiso a través del Banco Provincia de Buenos Aires (Bapro) para poder lograr revertir la crítica situación.

"Cuando vino la desregulación de las obras sociales —indicó Layús— muchos de los afiliados activos se fueron a las prepagas y los jubilados permanecieron en la obra social en vez de haberse decidido su traspaso al Pami".

Asimismo, el dirigente de los bancarios resaltó que desde el gremio en Rosario se puso en funcionamiento un centro médico para paliar en parte la situación.

"Esta obra social nos sigue descontando, queremos que se definan y si están quebrados que nos deriven a otra para al menos tener cobertura. Acá hay afiliados que han pagado sus aportes toda la vida", añadió indignada Savagnoni.

Firmas. Los damnificados se reunieron el 9 de enero frente a la sede de la Asociación Bancaria (San Lorenzo al 1300) para recolectar firmas y seguir presionando ante la conducción nacional para lograr una solución al problema que los afecta, pero aún no hubo una respuesta satisfactoria.

domingo, 11 de enero de 2009

UCR porteña denunció "falta de control parlamentario sobre el Banco Ciudad". Hablan de nombramientos de directores y "persecución ideológica"


Ya esta agrupación de trabajadores lo había advertido, ahora distintos medios, se hacen eco de una denuncia que no hace más que confirmar lo que venimos denunciando desde este blog. Se está manipulando al personal y el banco es un "caballito" de batalla político en la gestión del macrismo que intenta demostrar que las cosas marchan bien, cuando la realidad es que está todo mal en el banco. ¡ Basta de gerentes y directores a dedo, basta de inútiles cagándonos la vida, basta de persecuciones!
El vicepresidente del radicalismo porteño, Marcelo Montero, reclamó "mayor control parlamentario sobre el Banco de la Ciudad de Buenos Aires". El dirigente presentó un informe con denuncias sobre la entidad financiera porteña, al que tuvo acceso Impulso Baires.


Montero, precandidato a legislador porteño, afirmó, en dialogo con Impulso Baires, que “el Banco Ciudad debería operar como una entidad solvente y eficiente que ofrezca buenas alternativas de crédito y de inversión para las empresas y familias de la capital y no como agencia de empleo para amigos con prontuario, ni como instrumento para financiar a las grandes empresas”.


Además de la falta de control parlamentario para el nombramiento de directores y gerentes, Montero menciona las sospechas "por persecución ideológica y un manejo del negocio reñido con los intereses de los vecinos de la ciudad". En línea con lo señalado, el dirigente radical afirma que “es fundamental un monitoreo constante de la operatoria del Banco Ciudad para evitar que sus $ 11.500 millones de activos se conviertan en una caja para financiar las políticas macristas…”.


El informe un informe conocido por Impulso Baires, y que trabajó el equipo de Montero, se refiere a las propuestas como directores del Banco Ciudad a Néstor Grindetti, Gustavo Grasso y Gladys González, por parte del alcalde Mauricio Macri. El mismo dice, entre sus conclusiones: "El nombramiento de Grasso fue impugnado porque en ese momento tenía abierta una causa por estafa por 600.000 dólares en la venta de una empresa de informática a un grupo inversor español". "Grasso fue reemplazado por Gladys Gonzalez, directora que fue denunciada en 2006 por intento de soborno por haber ofrecido a la Revista 23 pauta publicitaria a cambio de “hablar bien” de Rodriguez Larreta". "Grindetti tenía una causa por defraudación y cohecho por sobreprecios en la construcción una represa cuando trabajaba en una empresa del Grupo Macri (la obra de la represa fue presupuestada en 80 millones de dólares y terminó costando 300 millones)". "Sergio Beros era Minsitro de Hacienda durante la gestión de (Jorge) Telerman. En la ejecución del pacto Macri – Telerman, Beros tuvo la función de intentar sanear las cuentas y pagar el costo político de un impuestazo antes de que asuma Macri. Por el cumplimiento de esa tarea, se ganó un sillón en el actual directorio del Banco Ciudad y forma parte de la mayoría macrista", sostiene el informe. Supuesta persecución ideológica "En los pasillos del Ciudad se habla de persecución ideológica y amenazas de despidos hacia los cuadros gerenciales que no se alinean a las políticas neoliberales" del directorio político. Al respecto, Marcelo Montero manifiesta que “los funcionarios de planta permanente no deberían estar afectados por los vaivenes de la política, esto tiene que ver con la estabilidad en el empleo público” y destaca que “la remoción del Gerente General y de 2 Gerentes de Área podría operar como un mensaje para los gerentes que no comulgan con las ideas neoliberales" del directorio político. Denuncian también: "manejo del negocio reñido con el interés de los vecinos" En base a cifras publicadas en la página web del BCRA, el equipo de Marcelo Montero destaca las siguientes cuestiones sobre el manejo del banco: "El Banco Ciudad financia más a las grandes empresas que a las PYME y las familias. El 54% del crédito está dirigido a grandes deudores (cartera comercial)". "El 30% de los activos corresponde al sector público. Es decir, que cada $ 100 que tomó de depósitos, $ 70 fueron prestados a familias y empresas y $ 30 al Estado". "El costo del fondeo es del orden del 3% (por la gran cantidad de depósitos a la vista que no devengan intereses). Sin embargo, para un préstamo personal cobra tasas del 30% TNA, que sumando gastos generan un costo financiero total para el cliente superior al 50% anual. En tal sentido, Montero señala que `esa diferencia de tasas es usuraria´". "Los gastos de administración del banco representan el 70% de los ingresos financieros y por servicios, mientras que en diciembre de 2007 representaban el 50%. Al respecto, Montero agrega que `ni aún cobrando tasas altas los macristas logran equilibrar las números del banco´".


Fuente: Impulso Baires

jueves, 8 de enero de 2009

En la Legislatura nos hacen la bicicleta


Los políticos que deberían representar los intereses de todos los ciudadanos que trabajamos, vivímos y padecemos los errores de malas administraciones a la hora de las designaciones de funcionarios y directorios, nos hacen la bicicleta al no mostrar el mínimo interés por las irregularidades que se suceden en el Banco Ciudad.

No solo se ha instalado un sistema perverso de adoctrinamiento para con los empleados que desde hace años cumplen con su trabajo, sino que se han producido pérdidas innecesarias por la inoperancia de gerentes y subgerentes puestos a dedo y por conveniencias económicas, personas que destruyeron instituciones como el Banco Itaú.

Se dió prioridad a "personajes" sin conocimientos en el área y externas, por sobre los empleados internos.

Volveremos a insistir con el reclamo y publicaremos la lista de funcionarios que fueron contactados.
¡Basta de acoso, de maltrato, de inútiles, de mercaderes, de traidores!

La insatisfacción laboral 2


Para muchas personas el trabajo aporta sentido a sus vidas, aumenta su autoestima, sienten que su labor es útil a los demás y encuentran un reconocimiento social. A través del trabajo, también se relacionan con otras personas y tienen la oportunidad de hacer amigos.
En algunos casos, supone una fuente de satisfacciones donde las personas encuentran cubiertas sus expectativas o deseos de prosperar y a través del cual logran independencia económica.
Sin embargo, en otros muchos casos, es una fuente continua de insatisfacciones donde los trabajadores ven mermadas sus posibilidades de expansión o sus deseos profesionales, se encuentran ante un horario incompatible con la vida familiar, unas condiciones desfavorables o un trato hostil por compañeros o jefes. Es decir, una serie de aspectos o características que hace que las personas se sientan insatisfechas profesionalmente.
Podemos definir la insatisfacción laboral como una respuesta negativa del trabajador hacia su propio trabajo. Esta respuesta negativa o rechazo dependerá, en gran medida, de las condiciones laborales y de la personalidad de cada persona y hace referencia al estado de intranquilidad, de ansiedad o incluso depresivo al que puede llegar una persona que se encuentra insatisfecha laboralmente.
Causas principales de la insatisfacción laboral
Hay una serie de factores que afectan negativamente a los trabajadores y que pueden llegar a producir una profunda insatisfacción y deseos de abandonar o cambiar de trabajo. Veamos a continuación las causas principales que producen en algunos trabajadores insatisfacción laboral:
Salario bajo. Para que un trabajador se sienta satisfecho en su trabajo es fundamental que reciba un salario justo.
Mala relación con los compañeros o jefes. En ocasiones, la mala relación suele ser causada por celos, envidias o recelos profesionales, o bien por comportamientos excesivamente pasivos o competitivos por parte de alguno de los compañeros.
En el caso de los jefes, suele deberse a una actitud prepotente y desconsiderada del jefe hacia sus subordinados o por excesivas exigencias o cumplimientos de funciones que no le competen al trabajador.
Incluso por celos profesionales y envidias que hacen que consideren a ciertos empleados como una amenaza que podría sustituirles en su jefatura. Las malas relaciones en el ámbito laboral hará que las personas sientan deseos de abandonar su empleo.
Escasa o nulas posibilidades de promoción. Cuando una persona ambiciosa con aspiraciones profesionales está estancada en su puesto de trabajo y observa cómo pasa el tiempo y, ni prospera ni asciende de categoría, se sentirá apática e insatisfecha ante su trabajo, pues no consigue lo que esperaba. Se produce un desequilibrio entre lo que ella esperaba y lo que ha obtenido realmente.
Personas inseguras. Personas que poseen poca confianza en sí mismas, en sus habilidades y aptitudes para desempeñar un trabajo. Sienten que son incapaces de realizarlo correctamente o de adaptarse al entorno laboral, esto les provoca temor y una profunda inseguridad e insatisfacción.
Dificultad para adaptarse al ambiente laboral. Hay trabajadores poco pacientes o constantes que continuamente están cambiando de empleo porque se cansan o aburren de su trabajo con rapidez o, porque desean alcanzar objetivos profesionales en un corto espacio de tiempo. Se sienten continuamente insatisfechos y necesitan cambiar de ocupación para intentar lograrlo.
Malas condiciones laborales. La insatisfacción laboral también puede ser consecuencia de las políticas de empresa, del entorno físico o de un empleo precario o rutinario.
Circunstancias personales y laborales. Aspectos como la experiencia laboral, la edad, el sexo, el nivel de estudios, cultura o preparación, son factores que determinan el tipo de empleo que podemos desarrollar, por lo que un empleo por debajo de la preparación o experiencia que tenga una persona le causará cierta insatisfacción profesional.
Igualmente ocurrirá en aquellas personas que no puedan dedicar suficiente tiempo a su familia y sus circunstancias familiares así lo requieran, como es el caso de trabajadores con hijos pequeños o con otras cargas familiares.
Consecuencias de la insatisfacción laboral
La insatisfacción laboral puede afectar al rendimiento de los trabajadores y a la productividad de la empresa, por lo que las empresas u organizaciones deben tratar que sus empleados se encuentren satisfechos profesionalmente.
Para ello, han de procurar que trabajen en un entorno físico adecuado y con unas condiciones favorables. Sitios ruidosos o lugares calurosos y congestionados o mal ventilados perjudican al trabajador y afectan negativamente a su rendimiento.
Otra consecuencia de la insatisfacción es la desmotivación o falta de interés por el trabajo, que puede llegar a producir en el trabajador tal apatía, que incumpla con sus funciones de forma habitual.
Por otro lado, esta situación, sea por el motivo que sea, puede llegar a producir ansiedad o estrés y, en caso extremo, el trabajador puede llegar a desarrollar una depresión.

La mayor fuente de insatisfacción laboral es la falta de reconocimiento


Otras causas de malestar son la mala remuneración y la imposibilidad de crecer. El 36% de los consultados se mostró feliz con el trabajo. En la otra punta, el 20% dijo estar poco o nada conforme.

El desempleo parece ser una mancha negra que tapa cualquier posibilidad de cuestionar la situación laboral en cada escritorio o puesto de Argentina.
Pero frente a la pantalla de la computadora, a solas, los empleados relatan otra cosa.
Una encuesta realizada a 18.700 personas marca una tendencia: 2 de cada 10 están poco o nada conformes con su trabajo. El estudio lo realizó la consultora D'Alessio IROL en empresas de toda la Argentina. De las respuesta se desprende que la disconformidad laboral está determinada por tres tipos de insatisfacciones: la falta de reconocimiento; la mala remuneración y la imposibilidad de crecimiento.Y los empleados "más felices" ¿quiénes son? El 36% contestó que está muy conforme con su trabajo porque ve satisfechas dos condiciones: las posibilidades de crecimiento (47 %) y un buen sueldo (46 %). Para el 8 % "realizar trabajos interesantes" es una fuente de satisfacción laboral; para el 20 % de los consultados los compañeros son los que les provocan las ganas de trabajar y para el 18% restante, la capacitación.
En Europa, el fenómeno del aburrimiento y la falta de estímulo en el trabajo está en plena expansión y son muchos los especialistas que ya comienzan a hablar de "la autoestima laboral".En España, por ejemplo, 2 de cada 10 empleados reconocieron en una encuesta del Ministerio de Trabajo que se aburren y el 30 % aceptó que "a veces" su labor les resultaba tediosa.La mitad de los italianos —según un estudio de la International Survey Research— están desmotivados en su tarea y el 87% de los británicos reconocen que se aburren en el trabajo. Sinceridad brutal de por medio: a usted, ¿qué le sucede?Según Martha Alles, directora de la consultora laboral que lleva su nombre, este fenómeno no se da en Argentina. "Más allá de que hayas personas insatisfechas, no se puede hablar de una tendencia en el país —explica—. No hemos llegado a los standars europeos. Allá se está pensando en lograr el equilibrio de la familia y trabajo y acá es difícil alcanzar la productividad. La gente buena está ocupada".Eduardo Press —consultor organizacional y autor de "Psicología de las organizaciones"— no coincide con esta postura. Asegura que la insatisfacción existe y, además de relacionarla con el maltrato, le ve síntomas que se pueden ligar al aburrimiento. "Hay gente que está sobrecapacitada para la tarea, lo que genera desidia o desinterés. Y los que están subcapacitados se desinteresan porque saben que no podrán lograr el objetivo", señala.María Laura —que por razones más que comprensibles no quiere identificarse con su apellido— preanuncia que a ella, a los 37 años y con una carrera que muchos calificarían de exitosa, va caer víctima de "una embolia laboral", una broma que inventó para describir una supuesta nueva patología que deriva del embole en su trabajo.¿Por qué gente así asegura que "se le quema el cerebro"? Los psicólogos consultados describen el aburrimiento en el trabajo como un estado de insatisfacción emocional que no está solo relacionado con el tipo de tarea que se hace sino también con la percepción que se tiene del trabajo y la satisfacción que produce hacerlo. "El aburrimiento nace muchas veces de la sensación de estar estancados, de perder el tiempo en algo que no nos interesa o en lo que no creemos" pero a lo que se está atado para pagar las facturas a principio de mes.Jorge Hambra tiene como parte de su profesión luchar contra esta tendencia. Es psicólogo y director de la consultora Joh Psicotecnia. "Creo que en las empresas argentinas hay agotamiento y hay aburrimiento", asegura. Para este consultor el factor clave es la falta de liderazgo de los mandos de muchas compañías. "En las empresas cuando falla el liderazgo, falla un relato interno que sea suficientemente efectivo y de tal contundencia que provoque cohesión entre las personas. Que las entusiasme, que le dé dignidad y sentido a la tarea que se realiza" a diario.Para Hamas, el aburrimiento no pasa por tener o no mucho trabajo sino por el sentido que se le da a la tarea hecha. "'No sé para qué hago esto' es el cuestionamiento más desmotivador que existe", asegura. En la lista de causas de la insatisfacción laboral también aparecen las órdenes contradictorias, los problemas para compatibili zar aspectos prioritarios de la vida del empleado con el trabajo y la diferencia entre las expectativas que se tenía del trabajo y las que realmente ofrece. Además, actualmente, comienza a pesar también los valores éticos de la empresa. Si no se comparten se puede sentir ajeno a todo lo que pasa alrededor. Por eso, en ese punto, Hamas insiste en que el liderazgo efectivo es el que trasmite valores. "El líder tiene que corporizar cierto valores y transmitirlos. Pero su actitud y acción tienen que ser creíbles sino tiene un efecto peor".
Fuente: Diario Clarín